Acupuntura: una gran alternativa para el manejo de dolor crónico
Soy una persona que le tiene fobia a las agujas. Cada vez que me tengo que sacar sangre me siento como niña chiquita, la mayoría de las veces lloro y hago drama en pleno hospital. La inyección es un terror que invade mi ser, pero he tenido que aprender a quitarme el miedo. Confieso que me costó mucho trabajo aceptar las agujas de la acupuntura, pero ha sido un gran descubrimiento y apoyo para mí, para aliviar el dolor crónico vulvar. Algunas personas piensan que la acupuntura es un método exótico, controversial o hasta improbable. Por lo que creo que es importante saber que ésta práctica tradicional de China, ya es reconocida por World Health Organization (WHO) como una alternativa, segura y efectiva, para el manejo de dolor crónico.
¿Qué es la acupuntura?
Para el oriente es el arte de sanar más viejo del mundo. Ellos hablan de que la salud es el resultado armonioso entre el yin y el yang, y su fuerza vital a la que nombran "qi". Se dice que las enfermedades son causa de el desequilibrio de estas fuerzas energéticas.
La acupuntura es una forma de tratamiento que involucra insertar agujas muy delgadas en la piel de una persona, enfocándose en puntos específicos del cuerpo, buscando generar un balance energético. Yo soy de las personas que cree en el efecto neurológico y antinflamatorio que tiene esta práctica china, pues logra reconectar las vías neuronales en el cerebro y el cuerpo, lo que ayuda a relajar el exceso de energía o tensión.
¿Cómo funciona?
Lo voy a describir como me lo explicaron y lo entiendo mejor. Cuando la aguja es insertada en estos puntos clave, las fibras nerviosas se estimulan, lo que resulta en un impulso del nervio que llega a la médula espinal. Ahí las células sueltan endorfinas, sustancias que inhiben o bloquean las señales de dolor al cerebro. Además, el efecto directo al sistema nervioso de las agujas, activa en el cuerpo la capacidad de auto-sanarse o "self healing".
Sobra decir que no es un tratamiento de una vez y ya me curé. Esto es un proceso largo. En mi caso, llevo tres años yendo con la misma especialista, cada 15 días. Hay veces que me siento bien y descanso por un tiempo, pero lo vuelvo retomar después. Es una práctica que he adoptado en mi vida, como ir al psicólogo o hacer ejercicio. Cada vez que voy salgo flotando, no sé bien cómo explicar el sentimiento, simplemente me siento bien y duermo como bebé.
Acupuntura y vulvodinia
La Dra. Judith Schlaeger, profesora de la Universidad de Illinois y el Colegio de Enfermería de Chicago, es la primera investigadora en conducir un estudio patrocinado por la National Institute of Health (NIH). El año pasado recibió $2 millones de dólares y una beca por cinco años para estudiar la acupuntura como un tratamiento efectivo para la vulvodinia. "Nuestra meta es encontrar el tratamiento que acabe con el dolor en la mujer", dijo Schlaeger. Los estudios que Judith ha hecho, reportan el impacto efectivo que tiene la acupuntura para reducir el dolor en la vulva, y en la penetración con las relaciones sexuales.
Las mujeres podemos padecer de vulvodinia por años, y como ya lo he platicado antes, muchas se quedan sin diagnóstico; el 40% en Estados Unidos. Es importante discutirlo y romper el silencio. No te sientas avergonzada por sentir dolor en tus genitales. No tienes porqué aguantar el dolor ante nadie y vivir así. Yo lo hice por mucho tiempo con un novio y me arrepiento. ¡No estás sola!
Si tienes ganas de probar la acupuntura recuerda primero platicarlo con tú médico. Hoy en día existen muchos acupunturistas y terapeutas holísticos, pero no olvides que es muy importante checar sus licencias y credenciales.