Clitorodinia : todo sobre el dolor en el clítoris
Aunque mi desorden vulvovaginal no afecta a mi clítoris, puedo entender perfectamente lo que se siente vivir con un dolor que altera toda tu vida, y por eso me dedico a lo que me dedico: a dar difusión.
La clitorodinia, el término para describir el dolor en clítoris, es probablemente uno de los tipos de dolor sexual que más destruye (emocionalmente) a las mujeres. Imagínense lo que una persona puede llegar a sentir cuando su principal fuente de placer, de pronto se convierte en una fuente de dolor. Además, es uno de los desórdenes sexuales menos comunes, por lo que su investigación ha sido muy limitada. No conocemos las estadísticas y los números que nos indican cuántas mujeres están experimentando este tipo de dolor, pero cada vez se reportan más y más. Claro, no ayuda que también es un tema que se evita platicar, por lo que el silencio alrededor de esto lo hace más difícil de comprender.
Hoy les platico todo lo que sé sobre la clitorodinia con la esperanza de que esta información les sirva de ayuda.
Primero, ¿cuáles son los síntomaS?
cuando hay extrema sensibilidad al tocar el clítoris, así como identificar señales constantes de dolor que vienen del clítoris.
cuando hay inflamación, o una constante o intermitente sensación de incomodidad, cuando hay excitación sexual (a veces se siente alivio con la masturbación).
cuando hay dolor en el clítoris que viene de estar sentada, por hacer algún tipo de ejercicio, por usar ropa muy apretada…
cuando hay ardor y quemazón durante o después del orgasmo que puede durar por horas o hasta días.
*Recuerda que el primer paso para empezar a sanar es romper el silencio
Hablemos de las causas de la clitoridinia
Por una variedad de razones, los nervios de este órgano tan sensible se irritan, lo que ocasiona tensión muscular anormal. Y, como cualquier desorden vulvovaginal, la combinación de una, dos, o varias condiciones diferentes es lo que detonan este dolor.
causa 1
sobre crecimiento, o extrema sensibilidad en las fibras nerviosas del clítoris y sus alrededores.
causa 2
neuralgia pos herpes simple: se desarrolla un desorden nervioso a raíz de la recurrente infección de herpes simple.
causa 3
condiciones dermatológicas: la piel de nuestros genitales también puede tener problemas. Condiciones como el liquen escleroso. Si este se esconde debajo de la glándula del clítoris, puede ser difícil identificarlo.
Así como infecciones crónicas en la piel genital.
causa 4
espasmos o tensión en los músculos del piso pélvico que rodean al nervio pudendo (el que suministra la sensación en el clítoris).
causa 5
cualquier compresión, daño, irritación, lesión… del nervio pudendo.
causa 6
malformación arteriovenosa: cuando hay una anomalía de vaso que lleva la sangre a los tejidos eréctiles del clítoris.
causa 7
bloqueo de vasos sanguíneos que reducen la circulación en los nervios del clítoris.
causa 8
desórdenes de cadera que causan dolor en la ingle irradiando al clítoris.
causa 9
problema anatómico que resulta en quiste o tumor: neuroma
causa 10
los efectos secundarios de ciertos medicamentos, como los antidepresivos, que aumentan los niveles de dopamina.
Tristemente el dolor sexual crónico es de las condiciones que más malos diagnósticos recibe en toda la medicina, y por ende, no se sabe tratar bien.
¿Qué necesita un buen diagnóstico?
1.
examen físico exhaustivo: conocimiento de las áreas más sensibles, descarte de anomalías en el clítoris, evaluación muscular, conocimiento de cualquier problema nervioso, examen detallado de la piel genital, en específico del clítoris. El doctor tiene que buscar inflamaciones, úlceras, lesiones… y se tienen que hacer cultivos para infecciones, bacterias, virus, hongos.
2.
Se tiene que hacer una evaluación general pélvica, así como de espalda baja, desordenes de cadera, espasmos musculares…
3.
Se tiene que hacer un examen vaginal también para ver si no hay flujos anormales que estén causando dolor/irritación.
4.
Después de tener todos estos resultados, se puede hacer también una resonancia magnética para checar anomalías en los vasos sanguíneos, y en la estructura del piso pélvico.
5.
Se recomienda la ayuda/consulta de un neurólogo para evaluar si existe alguna neuropatía.
Como les he mencionado varias veces, el acercamiento multidisciplinario es la mejor manera de tratar este tipo de patologías. Muchas especialidades tienes que estar en el mismo canal y comunicándose constantemente.
Ahora, sí, los tratamientos
Aquí se pone difícil porque no existe una pastilla o pomada universal para solucionar el problema. No es una gripa que se quita en un dos por tres tampoco. La buena noticia es que la clitorodinia es tratable. Se han reportado muchos casos de éxito, por lo que las invito a practicar la paciencia, y sobre todo, a no perder la esperanza.
Primero se tiene que identificar bien la causa, ya sea dermatológica, de sistema nervioso, vascular… o la combinación de varias, y de ahí partir para ofrecer las opciones de tratamiento adecuadas.
Por ejemplo:
Si es una condición de la piel, hay antibacteriales o antifúngicos orales o tópicos que se recomiendan.
Si es condición que afecta al nervio pudendo, hay tratamientos de inyecciones para anestesiar el área. ¡Bloqueos nerviosos!
Si es un problema de piso pélvico, la fisioterapia de piso pélvico es el mejor tratamiento para esto.
Si es un problema de cadera, terapia ortopédica es la recomendación.
Para una neuropatía hay medicinas como los anticonvulsivos y antidepresivos.
Y, en casos muy severos/extremos, cuando los demás tratamientos no están respondiendo, se hace una cirugía de liberación de nervios.
¿Cómo NO tratar a tu dolor?
No pretendas que no existe
No escuches las opiniones de personas que no están bien informadas/capacitadas/especializadas en esta condición.
No te permitas creer que sólo está en tu cabeza y que estás loca.
No automedicarse es una regla básica
No pierdas la esperanza
No dejes de buscar ayuda de una psicóloga para poder lidiar con todo esto
¡La información es poder!
Con cariño,
Pame
Esta publicación, así como todo el contenido en este espacio, es completamente informativo, es decir, no tiene la intención de sustituir atención médica. Este espacio no ofrece asesoramiento médico personal. Las acciones médicas son responsabilidad de cada quien.