Primeros pasos para sanar. ¡Síguelos!

Se empieza con uno mismo. Aprendiendo a hacer un ejercicio interno de self-love y self-care, y convertirlo en un hábito de vida. ¡Éstos cuatro pasos son los más importantes! Así lograrás romper con el silencio más fácil. #MakePeaceWithPain

1. Reconocer el dolor


2. Aceptar el dolor


3. Hacer las paces con el dolor


4. Dejarlo ir

El trabajo interno se logra yendo a terapia, aprendiendo a meditar, aprendiendo técnicas de respiración y relajación. Haciendo ejercicios de amor propio todos los días. Aunque suene cursi para algunos, sí funciona. Entre más escondas el dolor, entre más lo resistas, más permanece. Todo seguirá viéndose gris. Cambia el gris por el color rosa, déjalo brillar y que esa luz logre despertar la magia que hay en ti.


No sabes lo difícil que es para mi subir una foto en bikini o en calzones. Y eso que el blanco y negro disimula muchas imperfecciones. Tengo estrías, tengo chaparreras, tengo celulitis. Nunca me ha gustado mi cuerpo, nunca me he sentido cómoda en el. Si te identificas con esto, cambia el chip. Los mensajes negativos hacia el cuerpo lo lastiman. #BODYPOSITIVE

Todos los días que te levantes, y sobre todo cuando te veas en el espejo, agradece a tu cuerpo por luchar. Ámalo por todo lo que hace para sobrevivir. El dolor déjalo ir, reconoce que existe y que ahí esta, pero recuerda que no te define. Eres mucho más que el dolor.


Claro que no es de un día para otro. Llevo seis años y por fin logré hacer las paces con mi vulvodinia. No ha sido nada fácil, es un proceso muy largo y de mucha paciencia, pero se tiene que confiar. Trust the process! A veces sigo teniendo días malos, en los que no puedo parar de la cama, pero los buenos sobresalen. Recuerda que no estás sola, y que la vulvodinia no es tu culpa. Rompe el silencio junto conmigo. Juntas podemos lograr conseguir la ayuda que nos merecemos y que necesitamos.