¿Cómo estoy lidiando con mi dolor crónico?

El dolor crónico te cambia la vida tanto que no te imaginas. Puede sonar muy tonto pero llevo seis años sin subirme a una bici, y la verdad lo extraño. A veces es difícil dormir, ir a trabajar, socializar y hacer tus actividades del día a día. El dolor me aumenta en las noches por lo que las cenas, las fiestas, las bodas, cualquier evento importante se ha convertido en mi peor enemigo. Y casi nadie lo entiende. Me tengo que preparar física y mentalmente para salir en la noche, pero por lo general acabo tan cansada de mi semana que prefiero quedarme en casa. Mis fines pueden llegar a ser muy solitarios y eso es algo con lo que peleo constantemente. Está esa vocecita que me dice sal, ve a la fiesta, y claro que quiero ir, simplemente mi cuerpo no lo tolera.

El dolor crónico te puede hacer sentir ansiosa, hasta llegar a deprimirte. La buena noticia es que sí existen especialistas en manejo de dolor o algólogos, y que nos pueden dar tratamientos para aliviar los síntomas. El reto es encontrar al adecuado.

Aprender a manejar el dolor es igual de importante para la salud física como a nivel emocional. En Miami aprendí a lidiar con algunas estrategias para sobrellevar la vulvodinia, por lo que me gustaría compartir contigo con la esperanza de que también te ayude.

7 pasos para lidiar con el dolor crónico

Reconoce tus sentimientos y retoma el control de tu vida

El impacto de la vulvodinia en nuestra calidad de vida es muy fuerte. Los sentimientos negativos son completamente normales, pero ten mucho cuidado en que no te paralicen y dominen por completo tu vida. La única manera de retomar el control es aceptando el dolor. Escoge en enfocarte en tus fortalezas y cultiva una actitud positiva. Los pensamientos negativos detonan estrés, lo que intensifica el dolor. Dale la vuelta, aunque pienses que no se puede, sí se puede.

Adopta un estilo de vida sano

Come bien, duerme mejor (7-8 horas diarias), toma mucha agua. Haz el ejercicio que tu cuerpo pueda tolerar. El estrés de todos los días es un factor importante de dolor, por lo que aprender a meditar, o hacer yoga, y practicar técnicas de relajación es un gran recurso.

Se partícipe de tu propia salud

Lo he dicho muchas veces, y lo seguiré repitiendo: lee, lee, y no dejes de leer sobre tu condición. Investiga, y edúcate de la mano de tu doctor. Eres un miembro importante dentro de la comunidad de salud.

Prueba un enfoque multidisciplinario

Sé que no hay soluciones simples para tratar el dolor crónico, pero eso no significa que no podamos mejorar. Existen varios tratamientos para aliviar el dolor, y la mayoría de las veces lo que mejor funciona es la combinación de varios. Casi todos los casos de mujeres con vulvodinia probamos medicamentos junto con fisioterapia de piso pélvico y apoyo psicológico. La acupuntura es un gran complemento también.

Usa tu energía de una manera inteligente

Determina el balance adecuado para descansar y retomar tus actividades. Escucha y conoce tu cuerpo, no llegues a los extremos. Learn to rest, not to quit.

Controla el dolor

Lleva un diario de dolor, así podrás reconocer las actividades que detonan o aumentan el dolor. Habla con tu doctor para que te recomiende qué hacer en caso de que el dolor aumente de la nada y se convierta insoportable. A mí me sirven las compresas calientes o frías, dependiendo del clima.

Ayuda a las demás

Acércate a otras mujeres que también padecen lo mismo que tú. Contar y compartir tu historia puede ayudar a otras personas, y esa satisfacción te llena a ti también. ¡Escribe tu testimonio!

Cuéntame si te funciona o si tienes otro consejo que sea importante platicar.